Cada uno es dueño de su vida. Nada más que decir
Todos dicen de todos, es lo fácil, tiene que hacer, tiene que decir, tiene que pensar. Ahí me detengo con vehemencia, pues yo decido marcar una línea roja, en mi vida mando yo, solo yo soy dueño de mi. Depender económicamente, lo único que podría hacer dudar de ésto, tampoco manda sobre mi, ya he andado todo borracho, fumado, pidiendo en mano, por las calles, todos los días me levantaba a cero céntimos, y bebía y fumaba porros, cosa que ahora que no dependo de ellos, y/o tengo un poco de independencia económica, ando sereno y sobrio por la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario