Permítame tomar una copa con usted, yo sí conozco esta taberna marinera, y llamaré al orangután para que me sirva una cerveza, bien, prosigamos antes de su desespero intencionado, permítame "corregirle el final" sino es que ya usted lo hace desmadiado humano y "despectivo" entrecomillado pues cree ciegamente en la humanidad. Pero a mí parecer, para poder "mover del sitio y reflexionar". Oh! Querido Camus, nunca es demasiado tarde... Afortunadamente. ¿No es eso lo que quiso transmitir?. Ay! Hombre de poca "fe", y la idiotez intrínseca del "acomodarse", del humano, debería ser más egocéntrico, mi camarada Camus, y creer menos en nuestra raza humana. ¿Suicidio filosófico?. Permítame tratarle de usted, ¡Gran discurso en su Premio Nobel!... Pero hombre, permítame ser sarcástico, hombre de poca "fe", ¿entiende ahora por qué yo a mis 43 años, "juego" a recomenzar de nuevo?. ¿Querido, Maestro, Abert Camus?. Pues es precisa esa condecoración para mí, hacia usted. ¿No denominamos así de quién se aprende, aunque no sea el único, felizmente?. ¡Yo aun voy en primaria!, ¡a mis 43!. Gracias Maestro, por no reírse e incluso lo sé, entenderme empáticamente, y saludarme, con un respetuoso estrechar de manos, mirándonos, a los ojos.
Nota: y permítame de guardar silencio, de quién se ríe, simplemente, porque no comprende, creo que sinceramente, aunque usted lo desease "no se puede enseñar a razonar, a la idiotez humana", pero le doy mis respetos y gratitud, simplemente por intentarlo. De corazón se lo digo, pero usted ya me entiende.
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